jueves, 17 de junio de 2010

Herederos de Bohemia


No quiero ser Max
y esto tan cercano
no es Madrid.


Ahora mueren cientos
de estrellas en escalones
sucios de oficinista loca.


Ahora todos lo bares
tienen fondos curvos
y putas de barra y guiño.


La vuelta a casa
se hace eterna
dispuesto al lance.


Tu libro cobra vida,
la muerte se pasea
con mantón de manila.


Los charlatanes siguen dando coba,
la ternura ha cerrado los ojos.

1 comentario:

Enrique Gracia Trinidad dijo...

Por ahí van los tiros, Eduardo, enhorabuena y gracias por tus palabras.